domingo, 11 de septiembre de 2016

Laura Norton

¡Buenas (y románticas) noches!


He vuelto, al fin. Y con una entrada que hacía meses que quería escribir, pero me ha faltado el tiempo y los recursos para hacerlo. Así que, sin más dilación...
Hoy he venido a hablaros de Laura Norton. Es posible que hayáis oído hablar de ella. Y si no, es muy probable que el título de una de sus novelas os haya llamado la atención desde el escaparate de una librería, “No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas” o, en mi caso, “Gente que viene y bah”. Me pareció tan genial este último, y estaba en una época de mi vida que parecía tan oportuno, que me invadieron unas ganas de leerlo incontrolables. Y así lo hice. Por lo que podemos empezar a hablar ya de estas dos obras de arte.

Gente que viene y bah:

Sinopsis:

¿Cuántas probabilidades hay de que te toque el gordo de la lotería? ¿O de que el chico con el que estás a punto de casarte se líe con la presentadora más guapa de la tele la misma semana en la que además pierdes el trabajo?

A Bea le acaba de pasar (excepto lo de la lotería); así que decide huir y refugiarse en la casa de su excéntrica familia buscando un poco de paz, aunque acabará trayendo el caos a la vida de todos. Bea es así. En esta novela vas a encontrar un mercedes rosa, una casa en los árboles, un pelirrojo de caerse de espaldas (literalmente), muchas risas y unas cuantas lágrimas de esas que se lloran a gusto, que te liberan y te reconcilian con la vida. Una historia con la que descubrirás que siempre hay algo bueno esperándote a la vuelta de la esquina. Si sabes verlo. Y si no la cagas.

Opinión personal: 

A pesar de ser el segundo libro de la escritora, fue el primero que leí, como ya he dicho anteriormente, y que me hizo enamorarme de su forma de escribir. El libro te engancha desde el principio, cuando la vida de Bea se desmorona de golpe, y te atrapa poco a poco a través de sus personajes, a cada cual más especial y divertido. Mi favorito es, sin lugar a dudas, Fin, el sobrino de Bea que se pasa todo el libro lamentándose porque todos estamos condenados y porque la vida no tiene sentido alguno. Además, Laura Norton consigue evadirte por completo y meterte de lleno en el camino que tiene que seguir la protagonista para reconducir su vida, y te arranca más de una carcajada con las diferentes situaciones que viven sus personajes. Me atrevería a decir que me recuerda un poco a Bridget Jones. Confieso que incluso lloré con cierta parte del libro (si has leído el libro, me entenderás, y si no, lo harás cuando lo hagas). Así que, os animo a comprar este libro tan lleno de emociones.

Nota: 9/10

No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas:


Sinopsis: 

Si estás leyendo estas líneas es que te ha llamado la atención el título. ¿Te gustaría decírselo a alguien? ¿Serías capaz de decírtelo a ti mismo? Y lo más importante: ¿te gustaría mantener durante un buen rato la sonrisa que se te ha quedado en la cara? Pues esta es tu novela.

Te podríamos contar con más o menos gracia de qué va la cosa, para que te hicieras una idea: que si la protagonista, Sara, es muy maja, que si tiene un trabajo muy interesante (es plumista, ¿a qué nunca lo habías oído?), que si es un pelín obsesiva y alérgica a los sobresaltos... Por supuesto, la vida se le complica y se encuentra con que su piso se convierte en una especie de camarote de los hermanos Marx cuando en la misma semana se meten a vivir con ella su padre deprimido, su hermana rebelde y su excéntrico prometido y, sobre todo, el novio al que lleva mucho tiempo sin ver... Pero mejor no te lo contamos porque te gustará leerlo. Lo único que necesitas saber es que, desde el título, te garantizamos unas cuantas horas de descacharrante diversión como hacía tiempo que no disfrutabas.

Opinión personal: 

Es cierto que este libro no me gustó tanto como el anterior, pero para nada me dejó con un mal sabor de boca. Es más, consiguió colocar a Laura Norton en mi top 5 de mis escritores españoles favoritos mientras estaba leyendo, y una vez terminó, subió hasta el #1, sin lugar a dudas. Aunque sea el primer trabajo de Laura Norton, marca un fantástico inicio en su carrera como escritora. A través de “no culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas”, Norton nos enseña que, da igual lo locos y difíciles, tal vez hasta imposibles, que puedan ser nuestros objetivos, siempre puedes alcanzarlos, con muchísimo esfuerzo y rodeado de tu familia y amigos (aunque a veces te saquen un poco de quicio, toca aceptarlos igual).

Nota: 8/10

El estilo de Norton es muy parecido en sus dos obras, pero para nada aburrido o predecible, y siempre fácil de leer, sobretodo para mí, que enseguida me ganó con su sarcasmo y sus lecciones de vida ocultas en sus palabras. Considero que ha sido un buen momento para escribir esta entrada, ya que, como a mí, a muchos os gustará leeros el libro antes de ver la película, y es que “No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas” va a saltar a la gran pantalla el 11 de noviembre, y todavía estáis a tiempo de leerlo. No nos olvidemos, de que su tercer libro está en camino, y yo no podría tener más ganas. Desde aquí quiero darle las gracias a Laura Norton, por si lo lee, por su manera de hacer que la vida parezca más simple, fácil y divertida. De verdad que lo necesitaba.

Y hasta aquí la reseña de hoy,

¡nos leemos pronto, viajeros!

-Marie G.